Marc Andre Ter Stegen vuela también en los entrenamientos, dejando alucinados a sus compañeros. El último fue Gerard Piqué, que quedó entre sorprendido y desesperado por una brillante respuesta del meta alemán a un cabezazo suyo. Fue en un entrenamiento antes del parón de selecciones.
El portero mostró sus reflejos sacando una mano abajo a un cabezazo a bocajarro del central, que respondió cariñosamente, felicitando a Ter Stegen por el nivel demostrado una vez más.