Qué fichaje hizo el Arsenal con Martín Zubimendi, y qué centrocampista dejó ‘escapar’ el Real Madrid. Los 70 millones de euros que pagaron los gunners este verano por el ‘36′ se van a quedar cortos. Más aún si le da por sacar a pasear con asiduidad el cañón que estrenó en el Emirates Stadium ante el Nottingham Forest. Su golazo desde la frontal inauguró el triunfo del equipo de Mikel Arteta (3-0), el tercero de la temporada para el conjunto londinense, y su testarazo lo cerró. Que se preparen en San Mamés, que un nuevo cañonero y viejo conocido del fútbol español anda suelto.
Dos tantos hizo el extxuri-urdin en 36 jornadas de LaLiga 2024-2025, y dos ha hecho ya en su cuarto partido como gunner en Premier League. Pero la exhibición de Zubimendi fue más allá de los goles. Además de llevar la manija en la sala de máquinas, el donostiarra se encargó de cortocircuitar al Nottingham Forest del recién anunciado Ange Postecoglou. No tuvo el estreno deseado el greco-australiano, reemplazo de Nuno Espírito Santo.
De igual manera que Zubimendi llegó al norte de Londres para ser el director de orquesta gunner, Gyökeres hizo lo propio para marcar goles. Tres lleva ya el sueco en Premier League, el último a pase de Eberechi Eze. El ‘10′ estrenó titularidad ante los tricky trees, así como un soberbio Mosquera en defensa. El capitán de la Sub-21 dio una masterclass de anticipaciones y pases interceptados. Hasta Madueke se marchó ovacionado del Emirates Stadium en una tarde redonda para el conjunto londinense.
¡Martín Zambombazo!
En un partido con bastante protagonismo español, Zubimendi no podía ser menos. Mosquera, una vez confirmada la baja de William Saliba por lesión, lideró la zaga gunner junto a Gabriel Magalhães. Raya apenas tuvo que intervenir durante los primeros 45 minutos de su partido número 100 con la camiseta del Arsenal. Y Zubimendi, titular en el centro del campo junto a Merino... se sacó un zapatazo imposible para Matz Sels, en el 32′, y se estrenó como goleador con el conjunto londinense. El primer gol desde fuera del área de su carrera profesional.
Si bien el meta visitante evitó minutos antes el 1-0 del Merino con un paradón, nada pudo hacer ante la volea que cazó el ‘36′ desde la frontal. Los pupilos de Mikel Arteta estaban protagonizando un gran arranque de encuentro. Sin dejarla botar, el ex de la Real Sociedad empaló el balón para que cogiera una curva perfecta con la que evitar a todos los zagueros del Nottingham Forest. Un golazo que materializó en el marcador la superioridad gunner.
Antes, el Emirates Stadium tuvo que lamentar la lesión de su capitán Martin Ødegaard. La segunda que sufre el noruego en el hombro en cuatros jornadas de Premier League. Nwaneri entró en su lugar antes de alcanzar los 20 minutos de juego. Aún sin el ‘8′ en el césped, los gunner generaron mucho peligro en el balón parado. Especialmente en los saques de esquina botados por un Noni Madueke muy activo e incisivo en el costado diestro del ataque local. La otra lesión del primer tiempo la protagonizó Murillo, central del Nottingham Forest.
Aerolíneas Zubimendi
Ni un minuto de la segunda parte tardó Gyökeres en hacer aquello por lo que le han fichado este verano: marcar. El Arsenal, además de ser los reyes del balón parado y las jugadas ensayadas, también saben atacar en pocos toques. Balón en largo de Calafiori –falla el debutante Nicolò Savona a la hora de medir e pase–, Eze apura línea de fondo y el ariete sueco remata a portería vacía. Pudieron ser dos los tantos que hiciera el ex del Sporting CP ante un desaparecido hasta el momento Nottingham Forest, pero su trallazo se estrelló de lleno en la madera. También lo hizo el extraño remate de pecho de Chris Wood. Entre la yema de los dedos de David Raya y el travesaño anularon la mejor y casi única ocasión de los tricky trees.
¿En qué especialista entonces el Arsenal de Mikel Arteta? Pues así llegó el 3-0 gunner en el 79′. Así llegó, en una jugada ensayada perfecta, el segundo tanto de Martín Zubimendi. Otro golazo. Este, aunque muchos no lo crean, de cabeza. Tras varios toques en la frontal del área, Trossard levantó el balón con sutileza para ponérselo en la cabeza al donostiarra. Sonreía Zubimendi mientras sus compañeros le abrazaban. Quién iba a ser si no el ‘MVP del Partido’.